Más emociones, más creatividad, más inclusión

Cada alumno es un mundo en sí mismo, único, especial e irrepetible. Por ello, la educación inclusiva es uno de nuestros mayores retos educativos: conseguir aunar esa diversidad en un ambiente positivo donde cada alumno tenga la posibilidad de desarrollar sus aptitudes y cualidades individuales.

El Reto del trimestre busca soluciones en esa dirección, con el objetivo de compartir proyectos, actividades, planes o estrategias cuyo fin sea la educación inclusiva.

En este contexto, comienza también la novena edición del Máster en Educación Emocional, Social y de la Creatividad (EDESC) que la Fundación Botín ofrece junto a la Facultad de Educación de la Universidad de Cantabria. Un posgrado orientado a la formación de competencias emocionales, sociales y de la creatividad, consideradas esenciales en la educación para el siglo XXI.

Individualidad y empatía, nuestras mejores aliadas para la inclusión

Para atender a las individualidades de cada alumno, primero hay que entenderlas. Ana Cisneros, experta en inclusión y adaptación de recursos educativos, nos da las claves para crear un entorno escolar inclusivo que atienda a la manera particular de entender y percibir las enseñanzas de cada alumno. Y nos da ejemplos de cómo aplicar estas ideas a los recursos educativos Banco de Herramientas o Lectura, Emociones y Creatividad.

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